Desde Maputo en coche se tardan tres horas (si no hay mucho lío en la frontera) y la carretera está bien (bueno, no se puede comparar con las grandes carreteras occidentales pero para lo que es África… la carretera está muy bien).
Para variar este viaje no estaba programado… más que nada porque la idea era ir a la ciudad sudafricana de Nelspruit en busca de “una cámara de fotos” pero en el último momento los planes cambiaron (para variar) y entre volver a la “civilización de los grandes centros comerciales” y viajar en busca de aventura al pequeño reino de Swazilandia… pues preferimos la aventura y Swazi.
El viaje de “las supremas” como rebautizamos al viaje fue una pequeña escapada a este país vecino, tan cerca y también tan desconocido.
Así que Tatiana, Odette y yo madrugamos el sábado muy temprano y sin saber a dónde llegar y con sólo una guía de Lonely Planet y un viejo periódico swazilandes como referencia nos pusimos en camino. Lo más fácil era visitar alguno de los parques que estuvieran cerca de la frontera y una vez elegido buscar alojamiento.
Llegar fue fácil, incluso pasar la frontera que sorprendentemente no estaba llena de gente. Un par de sellos en nuestros pasaportes, “pago de tasas de importación del vehículo” (esto todavía no lo entiendo… si sólo íbamos a estar dos días allí pero la burocracia es la burocracia) y la correspondiente inspección del maletero (la verdad es que no sé que esperaban que lleváramos…) hacían más cercano nuestro destino.
En cuanto localizamos el la reserva a la que íbamos a ir “Hlane” nos pusimos manos a la obra en busca de alojamiento. Dentro del parque era caro, así que cogimos carretera y junto con nuestra maravillosa guía (mejor dicho, la maravillosa guía de Odette) nos pusimos a buscar por las poblaciones cercanas. Realmente Swazi es pequeño y aunque las distancias en el mapa parecen largas luego en realidad las distancias son cortas. Al final acabamos en un pequeño hotel cerca de Hlane. Dejamos las mochilas allí y nos fuimos a
Casi tres horas en pleno matto en un todoterreno especial que tenían los del parque para ver en vivo y en directo rinocerontes, antílopes, leones, tortugas, elefantes y hasta escarabajos peloteros.
Pero todo esto a menos de un metro… si es que yo sólo había visto animales salvajes en el zoo o en la televisión… y nunca tan cerca.
La sensación de adrenalina que sientes por el cuerpo cuando de repente el guía para el todoterreno y te empieza a señalar al grupo de rinocerontes o leones es emocionante… y los ves ahí en plena naturaleza y tú estás siendo testigo de todo. Y lo mejor es cuando tienes la oportunidad de bajar del vehículo y acercarte a verlos…pero acercarte de verdad…
Odette y Tatiana no dejaban de tirar fotos… para mí fue una “prueba de fuego” porque ahí estaba yo, viendo algo que jamás había visto antes en mi vida sin poder inmortalizar el momento… fue bonito, divertido y salvaje. Menos mal que mis queridas “supremas” conociendo bien mi “mono por las cámaras” de vez en cuando me dejaban las suyas para que yo también pudiera plasmar cada momento. Es que son situaciones que jamás se volverán a repetir, puede que haya parecidas pero nunca serán iguales.
Tuvimos suerte de poder ver tantos animales… normalmente la gente no los ve. Más que nada porque los animales van a su ritmo y no puedes pedirles que justo a la “hora X” aparezcan de detrás de un árbol para que “el aventurero/a de turno” (¡aquí me incluyo yo!) pueda hacerle una foto. Así que fuimos afortunadas, muy afortunadas…ya podíamos volver a Maputo con la satisfacción de haber visto de cerca (muy de cerca) a "a vida selvagem".
A la mañana siguiente y antes de de volver a Mozambique decidimos visitar otras localidades cerca de donde estábamos, Manzini, Malandela y como no… ver los mercadillos de artesanía. Hay auténticas maravillas en madera, telas, y sobre todo velas… creo que nunca he visto velas tan bonitas ni originales como aquí… y es que Swazi es famosa también pos sus “Swazi candles”. Y todo esto siempre rodeada de campos verdes, cielos azules, buena compañía, aire limpio y como no la buena energía fluyendo allá donde íbamos.
En definitiva, un fin de semana tranquilo, rodeadas de naturaleza y con recuerdos que se quedarán fijos en mi mente… y es que Swazi es mucha Swazi…aunque no vimos todo (nos faltaron la visitas a las cascadas, ver las danzas tribales y la visita a otras zonas como Ezulwini Valley, Mbabane o Lobomba) nuestra pequeña escapada valió la pena, sobre todo para mí…estar en contacto con “mamá tierra” ha sido la mejor medicina para recuperarme de todos los estreses, tristezas y demás…
8 comentarios:
Parece que los cambios de planes siempre son a mejor.
Seguro que la experiencia valio mucho la pena y aunque no pudiste hacer fotos, nadie puede quitarte las imagenes que te quedan en la memoria (que poetico ;-) )
Sigue disfrutando mucho.
"Hola periodista-aventurera! Gracias por recordarme! Nosotros nos encontramos encerradas por ahora...Ha habido una tormenta de hielo por tres dias...no ha habido electricidad...bueno que me siento como si hubiese regresado a mi ninez...sin luz y sin nada. LOL Pero gracias a Dios tenemos calefaccion...otros ni eso tienen...todo el pueblo estuvo sin electricidad por dos dias... y ahora ha sido el primer dia que se ha mantenido sin "desaparecer" de repente. En fin...no ha habido escuela por tres dias...un lio! Me encanta leer tu blog! Continua escribiendo.
Un besazo!"
oooo... a parte de las foto donde apareces tú (que estás tan guapa como siempre) la mejor es la del "escarabajo pelotero". ¡¡pero qué sana envidia me das!!
Pero qué fotos tan chulas...¿tan cerca estabas de los "animalitos"? yo creo que deberías hacer un apartado sólo de fotos y que la gente votemos...¿qué te parece? además ya tienes cámara ¿no?
Yo voto por la de los escarabajos peloteros!!
Sigue así aventurera!
Andrés
ps-bueno, las fotos en las que sales tú no se cuentan, que ya sabes que si hay que votar evidentemente votaría las tuyas.
No había tenido tiempo de escribirte en tú blog pero más vale tarde que nunca...¿no?
Un besazo fuerte desde Bilbao y que sepas que te queremos mucho.
Asier & Itziar
Preciosas fotos...que envidia!!!! y yo que me fui ese fin de semana a Mopeia, aldea perdida en Zambezia... y aunque Tatiana se riera de mi por sacar fotos (y, lo confieso...un video) de unos escarabajos peloteros en el Kruguer...esta visto que no soy la unica a la que le hacen gracia!!! es que no me digas...que modus vivendi!!! dar vueltas a una boñiga!! que reencarnacion mas cruel...voy a comportarme mejor a partir de ahora, por si las moscas. ja!!
Un beso o dos
Sandris, ¡qué guay la visita al zoo swazilandia, je je je. Como experiencia te felicito, una opción acertada. Sigue descubriendo más lugares.
Cada día está más cerca Mozambique
Un beso muy fuerte
Nata... que no es un zoo!!! los animales están sueltos...!! estoy deseando que vengas a visitarme para que conozcas todo estoy ;P
Por cierto, mi hermana me marujeó que Ricardo y tú estuvísteis de cenita en mi casa junto Rosa, Rita, Belinda.. jooo, que sana envidia me dan... mañana por fín llegan mi madre y Gina :)
besÖs y Feliz Natal!
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